sábado, 12 de abril de 2014

EL PUNTO MAS FRIO DEL PLANETA

Un equipo de científicos ha precisado el lugar más frío del planeta: -93 ºC grados bajo cero (136 ºF) registrados en la Antártida en agosto de 2010.
El estudio surgio de una investigación sobre las dunas de nieve en la Antártida. Los científicos detectaron la presencia de grietas en la nieve y se preguntaron si la capa más alta se estaba encogiendo. Esto les llevó a buscar datos de temperaturas.

Las temperaturas ex
tremadamente bajas se deben al aire atrapado durante un tiempo. Si el cielo está claro durante unos días, el suelo irradia calor al espacio, creando una capa de aire ultra frío por encima de la nieve.
 "Al atrapar el aire durante periodos largos de tiempo, al mismo tiempo que se irradia más y más calor al espacio, se generan las temperaturas más bajas que hemos sido capaces de encontrar", explica Scambos.

 


MAR MUERTO

El mar Muerto un lago endorreico salado, situado en una profunda depresión, a 416,5 m bajo el nivel del mar entre Israel, Cisjordania yJordania.
 Ocupa la parte más profunda de una depresión tectónica atravesada por el río Jordán y que también incluye el lago de Tiberíades. Los griegos de la Antigüedad lo llamaban lago Asfaltites, por los depósitos de asfalto que se encuentran en sus orillas, conocidos y explotados desde la Edad Antigua. Tiene unos 80 km de largo y un ancho máximo de unos 16 km; su superficie es aproximadamente de 810 km². Recibe agua del río Jordán, de otras fuentes menores y de la escasa precipitación que se produce sobre el lago, y el nivel de sus aguas es el resultado del balance entre estos aportes y la evaporación.

Las aguas de este mar son relativamente ricas en calcio,magnesio, potasio y bromo, y relativamente pobres en sodio,sulfatos y carbonatos, una composición significativamente diferente de la del agua de mar. Estrictamente hablando, la definición usual de salinidad no es aplicable; se define su cuasi-salinidad basándose en el apartamiento de la densidad del agua de 1000 kg/m³ a una temperatura de referencia de 25 °C. La cuasi-salinidad de sus aguas profundas es de 235 kg/m³, que corresponde a una salinidad del 28%, y crece a una tasa de 0,5 kg/m³/año en verano, y prácticamente no decrece en invierno.
 En la capa superficial puede llegar a un máximo de 238–240 kg/m³ coincidiendo con la máxima temperatura 34–35 °C. La salinidad varía con la profundidad, la estación del año y el régimen hidrológico del lago, que pasa por períodos holomíticos y meromíticos. Como comparación, la salinidad promedio del agua de los océanos está entre 3,1–3,8%, es decir unas 9 veces menos.
 Ningún ser vivo habita en él, salvo las artemias. Tan elevada salinidad es lo que impide a un ser humano hundirse en sus aguas de forma natural, debido a que la elevada densidad de sus aguas (1 240 kg/m³) ejerce un empuje superior a la del mar (1 027 kg/m³), pudiéndose flotar sin ningún esfuerzo, característica que le ha hecho mundialmente popular. Con todo, no es el lago más salado de la Tierra, ya que lo superan el lago Assal en Yibuti y ciertos lagos antárticos.
Es rico en potasas, bromuro, yeso, sal y otros productos químicos que se extraen en gran cantidad y de manera muy económica. Las compañías israelíes y jordanas instaladas en la parte sur del mar Muerto, a ambos lados de la frontera, aprovechan dichos minerales para el desarrollo de una importante actividad económica.
 Para llevar a cabo el proceso de extracción de minerales, es necesario evaporar artificialmente agua del mar Muerto, proceso que contribuye al descenso de sus aguas, un hecho completamente evidente para todo aquel que visita la zona. Ambos países también utilizan las aguas del río Jordán, su principal tributario (y en la práctica, el único) para irrigar grandes extensiones de tierra agrícola.