"Si la cueva se reabre al público, la entrada continua de visitantes provocará un aumento de la temperatura, de la humedad y del CO2 en la Sala Policromada, reactivando la condensación y la corrosión de las rocas". Además, las visitas, al desplazarse por el interior del recinto, levantarían dañinas partículas que quedan en suspensión en el aire, incrementando la erosión de las paredes y liberando bacterias y esporas de hongos. También entrarían nuevos nutrientes para el frágil ecosistema de la cueva.
Altamira se conservó durante miles de años, gracias a un entorno pobre en nutrientes y con escaso contacto con la atmósfera exterior.
Pese a que el cierre desde 2002 ha sido muy beneficioso para la famosa cueva y sus pinturas, los problemas de conservación están todavía lejos de estar resueltos y los científicos siguen haciendo controles de su estado.
Este museo incluye además de la replica, exposición e interesantes talleres.
Este es un taller sobre la caza en la prehistoria, donde te dejar utilizar sus herramientas.
Aquí también te enseñan a pintar en las paredes como hacían ellos."Efecto Venturi"