miércoles, 22 de octubre de 2014

PEZ DE HIELO

La trama jaspeada o bacalao antártico es un pez de los mares antárticos. Miden unos 92 centímetros y pesan unos 10 kilos. Prefieren bahías de fiordos poco profundos. Se alimentan de zooplancton, cerca de la zona de la superficie. Viven entre 5 y 20 metros de profundidad. La longevidad máxima para machos es de unos 12 años. Tiene anticongelante para soportar las bajas temperaturas. No tiene relación con los "verdaderos" bacalaos.

domingo, 5 de octubre de 2014

RAYOS PETRIFICADOS


Es un tubo de lechatelierita (sílice vitrificada) que se puede encontrar en arenas o areniscas y que es el resultado de la caída de un rayo atmosférico.
La caída del rayo sobre un terreno arenoso provoca la fusión de los granos de sílice, ya que la temperatura de este puede alcanzar los 4000 grados centígrados y hasta una profundidad de más de un metro, pero en una zona muy estrecha. La sílice queda así vitrificada en forma de unos tubos de rayo, de 2 a 50 mm de diámetro, a veces retorcidos o ramificados. Esas fulguritas abundan en los desiertos de arena y en las dunas litorales.
Pueden ser de diferentes colores dependiendo de la composición de la arena, en donde se formaron, incluyendo negro, bronce, verde y blanco translúcid. El interior de la fulgurita es comúnmente liso o delineado de unas finas burbujas; el exterior está generalmente cubierto de ásperas partículas de arena. Tienen apariencia de raíz y a menudo muestran pequeños agujeros. Las fulguritas algunas veces forman conjuntos vítreos en rocas sólidas.

La formación de fulguritas es un fenómeno poco frecuente, y extraer una íntegra es complicado por causa de la fragilidad del mineral, fácilmente quebradizo. Posiblemente el modelo mejor conservado se encuentra en la Academy of Natural Sciences de Filadelfia, ejemplar descubierto en 1940.


PEZ VOLADOR

Se encuentran en todos los océanos, especialmente en las cálidas aguas tropicales y subtropicales.
Su característica más sorprendente es el tamaño de sus aletas pectorales, inusualmente grandes, que le permiten volar y planear por distancias de más de 50 metros. La mayor duración registrada ha sido de 45 segundos. Teniendo en cuenta que los exocétidos adultos miden sólo unos 30 cm, esta capacidad va mucho más allá de los simples saltos fuera del agua. Los peces voladores alcanzan velocidades en el aire de 50 a 60 km/h (como un caballo que no es de carreras, a máximo galope). Estas distancias y velocidades son posibles gracias al rápido batir de sus aletas (unas 50 veces por segundo). La ventaja final de este mecanismo es una mayor posibilidad de escape ante predadores.
En algunas especies las aletas pélvicas también son inusualmente grandes, y hacen parecer que el pez tiene cuatro alas, como el Cheilopogon exsiliens. Sus ojos son más planos que los de la mayoría de los ojos de los otros peces, para ver fuera del agua. Viven cerca de la superficie del agua y se alimentan de plancton. Sus huevos son utilizados a veces en Japón, especialmente para preparar sushi.